Cualquier edificio es un espacio vivo donde el tiempo y su uso provocan cierto deterioro. Cuidar las instalaciones es prolongar su valor y su utilidad social, profesional o productiva, independientemente del tipo de edificio que sea.
Tras más de 35 años de experiencia, en Lunet sabemos que el mantenimiento de estos edificios supone alargar su vida útil más allá de su periodo de amortización, evitando su deterioro y prolongando el valor del activo. Además, estos servicios cierran el círculo en el mantenimiento integral, orientado a todo tipo de clientes, no únicamente los industriales.